Hola, Señor, sé que no he estado haciendo nada tan grande como hacer tu voluntad.
Soy un ser humano y tengo la intención de caer en el pecado tan rápidamente.
Necesito tu ayuda y tu misericordia y amor.
Necesito que me guíes y me liberes de mis enemigos.
Pon el deseo en mi corazón de buscarte, aún puedes ser encontrado.
Mi familia y yo te necesitamos más que ayer.
¡Por favor perdoname!