Me dirijo a ti con humildad y sinceridad para pedirte perdón por los errores profesionales que cometí. Reconozco que mis acciones han causado daño y preocupación, y por eso quiero expresar mi más profundo arrepentimiento.
Entiendo que mis equivocaciones han afectado no solo a mí, sino también a aquellos que confiaron en mi trabajo y profesionalismo. Por eso, asumo la responsabilidad de mis acciones y me comprometo a aprender de ellas para no volver a cometer los mismos errores en el futuro.
Espero que puedas encontrar en tu corazón la compasión y la generosidad necesarias para perdonarme. Me esfuerzo por ser una mejor persona y profesional, y sé que el perdón es un paso importante en este proceso de crecimiento y aprendizaje.
Gracias por tomarte el tiempo de leer esta carta y por considerar mis disculpas. Estoy dispuesto/a a remediar cualquier daño causado y a seguir adelante con humildad y determinación.
Con afecto y respeto,