He lastimado a mucha gente y no sé cómo repararlo. Sólo tú y tu amor infinito puede ayudarme.
No sé qué hacer mi Dios.
Me siento perdido, divagando por el mundo con miles de pensamiento en mi cabeza y ninguno me ayuda.
Sin ti no soy nadie y necesito un apoyo espiritual. Guíame sobre qué hacer y por dónde empezar.
Yo seguiré fielmente tus designios. Necesito un propósito en la vida.
Uno que realmente me haga feliz y me motive amar la vida. Tu fiel servidor, Mario.