Mi Dios gracias por todo lo que me has dado.
Gracias por mi hogar.
Gracias por la salud de mi familia.
Gracias por la comida que nunca falta en mi mesa.
Gracias por todas las oportunidades que he disfrutado y por contar con el amor incondicional e invalorable de mi familia y amigos.
Siempre has cuidado de mí y he podido comprobar tu amor infinito.
Gracias por mi familia y por cada día que me regalas.
Como Dejar la Envidia con la Ayuda de 5 Preguntas
¿Has visto a la chica sentada en el café, arreglada y sonriendo como si estuviera en el techo del Olimpo? ¿Quieres parecerte a ella